Valle de Benasque

La Ribagorza se halla enmarcada en un lugar privilegiado, a pie de las altas cumbres graníticas del Pirineo Axial. Los ríos Ésera, Isábena y Noguera Ribagorzana articulan la Ribagorza en tres preciosos valles. Se trata de una comarca en la que convergen impresionantes parajes, una naturaleza salvaje y un desconocido patrimonio monumental. Los amantes de la montaña encontrarán en el Parque Natural Posets-Maladeta un espacio único, con espectaculares cimas como el Aneto o el Posets, preciosos Ibones, prados alpinos y frondosos bosques.

Benasque

La historia está presente en el ambiente de Benasque. La iglesia de origen románico, del siglo XIII, el palacio de los Condes de Ribagorza con tímpano renacentista; la Casa Justo, la más medieval de todas por su aire de fortaleza y la torre de los Infanzones, presta una silueta característica al conjunto urbano.

Cuenta con una amplia infraestructura turística comparable a la de Jaca que permite al viajero disfrutar de estancias largas sin tiempo para aburrirse, combinando excursiones, actividades de turismo activo y ocio nocturno.

Parque Natural de Poset-Maladetas

Tres cuartas partes del parque se encuentran por encima de los 1.800 metros y cuenta con los más espectaculares paisajes de alta montaña creados por efecto de los glaciares. Profundos valles esculpidos en la era glaciar que han formando colosales circos y centenares de profundas cubetas ocupadas por ibones en un ambiente puramente alpino y escarpado.

El valle de Benasque es más de cimas que de travesías y las ascensiones por el parque son exigentes quedando reservadas a viajeros con buena preparación física y técnica. Sin embargo sus profundos y largos valles permiten excursiones para todos los públicos por pistas y sendas bien acondicionadas y sin demasiado desnivel. Son destacables los valles de Estos y Ballibierna con decenas de Ibones o los Llanos del Hospital.